domingo, 9 de diciembre de 2007

EL CIRCO GLOBAL Y LA POLÍTICA INVERSA

En los últimos años la política se ha convertido en un circo global que todo lo atrapa. Antes el circo llegaba a la ciudad, cada cuatro años, y luego se iba. Ahora permanece para siempre. Antes, los payasos hacían reír a niños y a mayores. Ahora nos hacen llorar a todos. Imaginemos a un payaso de ese circo que nos cuenta un chiste en el que nos dice que eliminan ciertos impuestos de los ricos y “reducen” los de los pobres. ¿A quién le hace gracia? Sólo a los que están en la primera fila, que han pagado las entradas más caras y que no tendrán problemas para pagar también la educación, la sanidad,… Generalmente eran un payaso “tonto” y uno “listo”. El listo va y dice:
- “A ver, vamos a sacar a una persona del público, usted señora. ¿Usted trabaja, señora?
- No. La verdad es que no estoy preparada para nada.
- Pues a partir de ahora QUIERO que usted sea una mujer autónoma, independiente. QUIERO una mujer moderna, del siglo XXI, bla, bla, bla,…
Y el pasayo tonto dice:
- Eso, eso, A lo mojó puede aprender algo. Diga conmigo: ZP es tonto.
Y la señora responde, casi llorando:
- A mí me dijeron cuando era una niña que tenía que casarme para servir a mi marido y tener hijos. Y eso es lo único que sé hacer, y lo hago muy bien, y soy feliz, y no quiero trabajar porque ya trabajo bastante en casa.
Y cuando se van los payasos, salen las fieras. Para que no muerdan a alguien, sobre todo si hay algún ministro entre el público, ya les han dado previamente un buen bocadillo y les han metido unas cuantas horas de autobús en el cuerpo para que estén un poco mareados. Y el domador, látigo en mano:
- ¡Más fuerte, no se oye: ZP es un terrorista!. Venga, que el que lo grite más fuerte tiene premio (posiblemente un puesto de eurodiputado).
Mientras tanto por entre el público unas señoritas venden rifas.
-Señorita, deme una, ¿Cuánto cuesta?
- Baratita, un euro.
- ¿Y qué se rifa?
- El primer premio es ir el número dos en la lista.
- Ah, esto…, deje que no tengo suelto.

Es responsabilidad de todos el volver a elevar la política a su rango. La política es el proceso y actividad orientada, ideológicamente, a la toma de decisiones de un grupo para la consecución de unos objetivos. La ciencia política estudia dicha conducta, mientras quienes desempeñan actividades de esta índole se denominan políticos. Con la política sucede lo mismo que con el periodismo. Es lamentable ver en programas de televisión a personajes que se autodenominan periodistas sólo porque llevan un bolígrafo y un papel, y su éxito consiste en que hablan más alto que el resto y dicen estupideces más grandes.
Así que todos los ciudadanos somos los responsables de esta degeneración, porque no somos capaces ya de distinguir a los auténticos periodistas, y a los auténticos políticos. Y cuando aparece un individuo diciendo “todos los políticos son unos sinvergüenzas”, el auténtico político se pone a trabajar para elevar el nivel de educación del pueblo al que representa, mientras que el falso político dice:
- Eso, eso, sobre todo ZP.
Y es que “a río revuelto…”

1 comentario:

factoria7gritos dijo...

Hola Luis Miguel, te invito a participar en la campaña para poner nombres a las calles de Oviedo. Saludos!!!